Antes de empezar a responder esas dudas es importante decir que la leche materna es el mejor alimento para tu bebé, ya que contiene macronutrientes (hidratos de carbono, proteínas y lípidos) y micronutrientes (vitaminas y minerales) en proporciones adecuadas logrando un equilibrio, para el crecimiento y su desarrollo. La alimentación del recién nacido es importante, pero no nos olvidemos que también lo es tu nutrición. De ella va a depender que tú bebe obtenga los nutrientes necesarios para su crecimiento y tener una salud óptima.
¿Puedo realizar algún tipo de dieta?
No es recomendable, ya que la lactancia constituye una de las etapas de tu vida en que se producen mayores requerimientos nutricionales. Eso se debe a la cantidad de nutrientes que se traspasan diariamente a tu hijo a través de la leche. Después del nacimiento, puede que no te sientas muy cómoda con tu cuerpo, pero no te preocupes que esos kilos extras son necesarios para ser utilizados para la producción de leche. Esto requiere de una gran cantidad de energía; se puede llegar a gastar hasta 750 kcal /día hasta el sexto mes. De esta manera, la lactancia te ayudará a retornar gradualmente a tu peso. Es por esto que no es recomendable realizar algún tipo de dieta restrictiva, debido que hay un desgaste calórico natural. Pero sí es importante que tengas una alimentación completa y equilibrada. Debido que los nutrientes que le aportas a tu bebé salen de tu alimentación y de tus reservas de nutrientes.
¿Tengo que priorizar un tipo de alimentos?
Priorizar un alimento en particular no, pero al igual que en el embarazo, los nutrientes claves en este periodo son: hierro, calcio, acido fólico y omega 3.
Calcio
Durante esta etapa hay una pérdida mínima natural de la masa ósea, la cual se revierte después del destete. Es importante que se continúe con el consumo de alimentos que contienen calcio, ya que esto ayuda que las pérdidas se recuperen rápidamente al suspender la lactancia. Los alimentos que contienen calcio son: lácteos (queso, leche, yogurt), vegetales de coloración verde, semillas y cereales.
Omega 3
El omega 3 pertenece al grupo de las grasas. Las grasas es el único nutriente variable en la leche materna y el único cuya calidad se modifica en función de tu alimentación. Es importante consumir grasas de calidad. Este nutriente se asocia con un mejor desarrollo de la visión y del cerebro de tu bebé. Lo podemos encontrar en aceite de oliva y pescados.
Agua
Es bueno que consumas líquidos en función a tu sed, sin la necesidad de forzar la ingesta. Es importante aclarar que el consumir más líquido no aumentará la producción de leche.
¿Influye lo que como en la leche materna?
Sí, una alimentación variada determinará un cambio constante en el sabor de tu leche, esto va a preparar a tu hijo para una mejor aceptación de los alimentos en el momento de incorporarlos. No es necesario restringirte o eliminar algún alimento que consumas, pero sí es importante que observes si tu bebé luego de la ingesta de determinado alimento presenta cólicos o algún malestar. Puedes evitarlo temporalmente y comprobar si son los causantes.
La leche materna aporta todos los nutrientes que tú pequeño necesita para crecer sano y fuerte. Además contiene anticuerpos que lo protegen de múltiples enfermedades. Pero no olvides la parte más importante, te brinda ese lazo único entre tú y él, creando una conexión física y emocional inigualable. Por eso, disfruta al máximo de esta etapa, sin olvidar que debes alimentarte con lo mejor.
Lic. Leticia Tamayo
Lic en Nutrición
tamayoaguirre.l@gmail.com
